Etapa 034: 31/08/2011 La Cartuja - Zaragoza

Etapa muy, muy corta pero que se me ha hecho muy, muy larga: el pie esta dando guerra desde hace varios días, y está bastante hinchado, por lo que decido ir al médico despues de sellar la credencial en la Basílica del Pilar.

El médico me dice que de caminar de momento nada; reposo absoluto durante una semana y despues ya veremos, así que me tomaré una semana de vacaciones. A ver...

Zaragoza ya se ve en la lejanía.

Y por fin, el Pilar.

Etapa 033: 30/08/2011 Fuentes de Ebro - La Cartuja

Vuelve a aparecer la vegetación, en forma de cultivos, y la "civillización". Lo malo es que también vuelve a aparecer la calor: 44 grados a las 18:25!!! Inaguantable!!!

Este "pajaro" no lo tengo identificado...

De vez en cuando, uno se encuentra bellezas como esta.

44 grados a las seis y veinticinco de la tarde!!!

Hora de acicalarse...

Etapa 032: 29/08/2011 Paraje de La Almolda - Fuentes de Ebro

Y con esta se acaba el desierto. Aunque se agradece encontrar casas, calles, coches, gente, lo echaré en falta. Seguro.
Llegando a Pina de Ebro, primer pueblo de la etapa, me encontré con Carlos, un ciclista de Soses que también hace el camino, pero en bicicleta. Suerte amigo, y buen camino.
En Pina de Ebro pude disfrutar de un parque lleno de pinos, y una fuente con agua! Esto es porque ni en Candasnos, ni en Bujaraloz, ni evidentemente en todo el desierto, hay una sola fuente de agua, ni acequia ni canal de agua. Solo una pequeña laguna de agua supongo que contaminada, puesto que no había vegetación alguna.
Hasta aquí, la parte buena. La mala es que en Fuentes de Ebro, a donde llegué bastante tarde, cerraron los albergues por diversos problemas. Menos mal que el panadero, que fue quien me lo dijo, tambien me indicó donde suele dormir la gente: en la entrada del centro parroquial, que tiene una entrada con porche bastante amplio. Y allí me quedé.

Ultimas imágenes del desierto.

Este tramo, mucho más pedregoso, es el último antes de Pina de Ebro.

Carlos, otro peregrino.

La cigüeña, desde su nido.

Un pequeño pajarillo, en el parque de Pina de Ebro.

Y por fin, el Ebro!

Atalayas para que las cigüeñas construyan sus nidos.

Etapa 031: 28/08/2011 Bujaraloz - Paraje de La Almolda

Más de lo mismo. El único punto de referencia, es un restaurante al lado de la carretera, que se llama Venta de Santa Lucía, junto a una gasolinera. Es el único sitio donde se puede conseguir agua, comida, y algo de conversación si se quiere...

Aquí ya empieza a aparecer tímidamente algún que otro árbol, pero separados por centenares de metros, sino más.

Un solitario árbol.

Allá en la lejanía, dos árboles más.

Inmensidad. En la lejanía, a cerca de un kilómetro, un árbol. La única sombra existente en varios kilómetros a la redonda.

Nada. Absolutamente nada. Ni un matorral.

El sol reseca la tierra sin clemencia.

El dormir aquí, es toda una experiencia!

Y las puestas de sol, como siempre, espectaculares!

Etapa 030: 27/08/2011 Candasnos - Bujaraloz

El dormir en pleno desierto, aunque sea en uno pequeñito como el de Los Monegros, es una experiencia inenarrable. No hay palabras para explicar el silencio que hay por la noche, los miles y miles de estrellas que están ahí, encima de mi cabeza, y el viento suave que va refrescando el cuerpo, y preparándolo para lo que viene despues: una bajada de temperatura espectacular. Pero bueno, es el desierto.

Un visitante inesperado: una aguila, que no sé de donde puede haber salido, ya que a la vista no hay colina alguna.

Con el sol reflejándose en su espalda, ofrecía una imagen de postal.

La polilla más grande que he visto en mi vida! hacía cinco centímetros de la cabeza a la cola. Misterios de la fauna local.

En las cercanías de Bujaraloz (Capital de la comarca), aparecen parcelas ocasionales de cultivos.

Toda una explicación.

Las puestas de sol son... pues eso. No hay palabras.

Etapa 029: 26/08/2011 Fraga - Candasnos

Entro de lleno en el desierto. La salida de Fraga, con una subida suave pero constante, me lleva a unos altiplanos absolutamente solitarios y sin apenas vegetación, que me hace recordar las cimas de los Pirineos, por encima de los 2.800 metros. A partir de ahí, una sucesión de pequeñas subidas y bajadas, siempre con el mismo solitario ambiente: grandes, grandísimos espacios, sin que se vea a nadie a la vista. Espectacular!

El bungalow (el de la luz encendida) del camping de Fraga, donde pasé la noche.

El río Cinca, a su paso por Fraga.

La subida, a la salida de Fraga.

Imagen espectacular del altiplano que hay arriba, absolutamente solitario.

Y ya arriba, soledad, aridez, desolación...

Aquí el paisaje ya se alarga hasta donde alcanza la vista, siempre con lo mismo: no hay nadie, apenas unos matorrales resecos, el sonido de la carretera, a cuatro kilómetros apenas se oye...

La paz y el silencio absoluto sólo se rompe con el trino esporádico de algún pájaro.

Las únicas construcciones que rompen la monotonía y dan algo de sombra, son viejas casas abandonadas de hace mucho, mucho tiempo

Incluso esta pequeña laguna, que debería ser un pequeño oasis en el desierto, no tiene ni una sola planta verde! Sólo algún matorral reseco y cubierto de polvo. Por si acaso, ni me acerqué al agua.

Etapa 028: 25/08/2011 Alcarràs - Fraga

Etapa en la que salgo de Catalunya, y entro en la Comunidad de Aragón, en Huesca concretamente. Pocos cambios en el paisaje, y en la gente,que siguen hablando catalàn (Aunque no todos).
Mención aparte merece el cura de Fraga, que para llegar al camping donde tenían el albergue (Un bungalow), me envió a dar un rodeo de cuatro kilómetros. A la mañana siguiente, ví que había un camino directo del camping al centro de Fraga, de ¡500 metros!. Sin comentarios.

Los campos, más de lo mismo.

Y por fin, entro en tierras aragonesas.

Etapa 027: 24/08/2011 Bell-lloc d'Urgell - Alcarràs

Otra vez repetición de la etapa de ayer: más frutales, más calor agobiante, y para rematar la jugada, en Alcarràs no hay ni una sola fuente. Según me dicen los municipales, debido a la avalancha de inmigrantes temporeros, para evitar que destrocen las fuentes, las cierran. Pero a cambio me dan una botella de agua mineral de las que tienen para ellos, súper-fría. Mil gracias!

Un contraluz al amanecer

Poco a poco el sol se levanta, y el paisaje empieza a cambiar.

Los inacabables frutales.

El río Segre, a su paso por Lleida.

Visitantes ilustres del río.

Una cigüeña, planeando por encima mío.

En lo alto de una grúa de la construcción...

Y un primer plano.

Etapa 026: 23/08/2011 Castellnou de Seana - Bell-lloc d'Urgell

Etapa integramente entre frutales, manzanos concretamente; ni que decir tiene que la comida del mediodía la tengo más que resuelta: sólo tengo que estirar la mano!

El contrapunto lo pone el calor, que si bien no es tan salvaje como el de ayer y anteayer, continúa rondando los cuarenta grados. Razón de más para comer más fruta, por aquello de hidratarse, y porque está buenísima. Al amanecer, claro; al mediodía está ardiendo, y hay que buscar agua para que se refresque un poco...
Al llegar al pueblo de Bell-Lloc d'Urgell, a las 11:20 de la mañana, me dicen que el albergue está completo!. A las 11:20 de la mañana! Y por otro lado, ¿por dónde han pasado los peregrinos, pues a mí no me ha adelantado nadie? Raro,raro, raro...
Pues nada, a seguir caminando, y pasados cuatro o cinco kilómetros del pueblo, a preparar el campamento, y lo que digo siempre: mañana será otro día...

Campos y más campos de cereales, y cuando no, frutales...

Y éste, de alfalfa...

Lo que siempre se me venía a la cabeza: la película de "Los chicos del maíz"...

No siempre lo interesante son los grandes animales...

¿Haciendo gimnasia?

Aquí hay otro; de éste no sé ni el nombre. Sé que son muy inquietos, y que apenas paran. Este debía estar cansado...

Un primer plano

¡Esta es la buena! (Y estaba a unos ochenta metros)