Etapa maratoniana, y con la calor en aumento. A mitad de camino, Jordi ha decidido ir adelantándose (él va más rápido), y quedamos en vernos en Jorba, a la hora que llegue. El calor comienza a hacerse insoportable, sobre todo porque viene con mucho bochorno, y esto hace que a la que te muevas un poco ya estés todo mojado de sudor. Al final he conseguido llegar a Jorba a una hora un poco intempestiva, pero dentro de lo "legal": a las 20:30.
En Jorba paramos en un albergue que lleva un cura que parece cualquier cosa menos cura: en pantalones cortos, con camiseta, campechano a tope y con un sentido del humor envidiable. Rector de Jorba, cura de 30 (Sí, sí, 30) localidades más, cocinero, hostalero y hasta el año pasado, profesor del instituto de Igualada. Mossén Enric, mil gracias por su hospitalidad, y sobre todo por su buen hacer!
En este albergue hemos coincidido con Ela, una jovencita californiana de Hollywood que empezaba a hacer el camino en bicicleta, pero tres o cuatro etapas solamente por cuestión de vacaciones.
Jordi, por su parte, decide llamar a sus familiares para que lo vengan a buscar, pues él tambien decide hacerlo por tramos, un tramo cada año; parece ser que el único que lo hace del tirón es un servidor...
Finalmente nos vamos a la cama (Los tres en la misma habitación, por indicación del cura: lo que hay que ver...) y me quedo frito en cuestión de segundos.
En Jorba paramos en un albergue que lleva un cura que parece cualquier cosa menos cura: en pantalones cortos, con camiseta, campechano a tope y con un sentido del humor envidiable. Rector de Jorba, cura de 30 (Sí, sí, 30) localidades más, cocinero, hostalero y hasta el año pasado, profesor del instituto de Igualada. Mossén Enric, mil gracias por su hospitalidad, y sobre todo por su buen hacer!
En este albergue hemos coincidido con Ela, una jovencita californiana de Hollywood que empezaba a hacer el camino en bicicleta, pero tres o cuatro etapas solamente por cuestión de vacaciones.
Jordi, por su parte, decide llamar a sus familiares para que lo vengan a buscar, pues él tambien decide hacerlo por tramos, un tramo cada año; parece ser que el único que lo hace del tirón es un servidor...
Finalmente nos vamos a la cama (Los tres en la misma habitación, por indicación del cura: lo que hay que ver...) y me quedo frito en cuestión de segundos.
Toda la plana del Vallès, cubierta con la niebla matinal. |
Curiosidades de Montserrat: La Foradada y La Cadireta |
Se mire desde donde se mire, Montserrat es impresionante! |
Ya se vislumbra Igualada al fondo, en la lejanía... |
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